¡Si puedes soñarlo, puedes lograrlo!
Nuestra historia
Todo empezó con un sueño de un grupo de jóvenes apasionados por su profesión.
La historia se remonta al 2008, un tiempo donde la disciplina de la seguridad y salud ocupacional en Bolivia estaba comenzando a afianzarse y los sistemas de gestión estaban generando un boom profesional en la época. Aquel entonces, las opciones de formación eran limitadas y en los pocos cursos de especialización que se ofertaban siempre coincidamos las mismas personas.
El hecho de aprender de nuestros facilitadores y colegas nos motivaba, haciendo que investiguemos y pongamos en práctica las cosas que la teoría decía. El conocimiento, la ciencia y la implementación de estos conceptos era sencilla en las industrias grandes y con recursos; pero era todavía una utopía lejana para el resto del país, y fue así que nació la idea de conformar una sociedad científica para promover y desarrollar lo que nos apasionaba.
Empezamos bien, el 2008 era una idea nacional y nos juntaba a todos, era el motivo perfecto para hablar de las novedades o replicar algunos cursos internacionales de aquellos que podían buscar su especialización en el extranjero.
El 2009 decidimos hacer más grande esta sociedad, y nos propusimos ir a nuestros lugares de origen y juntar a los profesionales relacionados a la Seguridad y Salud en el Trabajo. Es así que, en Cochabamba, un 28 de abril de 2009, cerca de 20 personas, representantes de varias empresas locales, firmaron un acta de entendimiento para llevar adelante esta faena. Nacimos el mismo día que se conmemora la Seguridad y Salud en el Trabajo en el mundo entero.
Salimos desde abajo, firmes a nuestra idea, al principio éramos muchos, algunos con intereses particulares y otros con intereses grupales. Empezamos en una consultora amiga, que luego por los conflictos de interés nos obligó a buscar un ambiente propio. Parte de la anécdota, nace en que compartimos incluso un consultorio ginecológico para poder atender; esto, y un par de escritorios con una computadora portátil era todo lo que teníamos para arrancar.
Un punto de inflexión en nuestra historia se dio el 2010. Con aportes propios queríamos mantener unido al grupo que empezó esta sociedad. Programamos una cena con todos los profesionales que arrancaron el proyecto y sumamos a las autoridades nacionales y locales. Al concluir el acto, el Comandante de Bomberos de la ciudad, Cnel. Marcelo Sánchez Mercado, se nos acercó y nos preguntó: “cómo podríamos mejorar el trabajo de los bomberos del país con el trabajo de la sociedad”. La respuesta dio pie a un trabajo ininterrumpido con los bomberos de la policía boliviana logrando hitos únicos en el país tales como: Certificación ISO 9001, creación del cuerpo de emergencias químicas a nivel nacional y la promoción del programa “Inspectores Técnicos de Prevención y Protección Contra Incendios”. Incluso apoyamos con infraestructura (auditorio Sof. Torrez Botelo), equipos, materiales, logística y otros para atender las principales emergencias nacionales en los últimos años.
Nuestra institución ha buscado ser autosostenible. Nunca hemos tocado puertas ni hemos pedido apoyo nacional o aportes económicos a nuestros socios. Dimos nuestro trabajo para financiar nuestra causa; así es como empezamos a crecer institucionalmente. Es duro, pero sin recursos no puedes salir adelante.
Con el pasar de los años fuimos más visibles y teníamos eco nacional, e incluso internacional. Hacíamos muchos eventos de capacitación con docentes de altísimo nivel para cubrir en Bolivia los baches de formación técnica que habíamos sufrido años antes. Nos iba bien académicamente y no tan bien económicamente, pero seguíamos haciendo lo nuestro, a nuestro modo y con nuestra pasión inalterable.
Cerca al 2013, con el crecimiento institucional marcado, muchas voces de los colegas antiguos quisieron ahogar el proyecto, pidiendo la administración de nuestros recursos en una ciudad ajena a la nuestra. Gastaron mucha energía y tiempo en fragmentar nuestra unión, en generar campañas de desinformación y desprestigio. Fueron tiempos duros, incluso llegando a afectar nuestras fuentes de trabajo principales. Estábamos a punto de dejar este proyecto y dedicarnos a nuestras vidas normales.
Una tormenta no dura años. En el vendaval de sentimientos encontrados, El Sof. Martín Garbay de bomberos un día nos dijo: “Las personas estamos para dejar algo en esta vida, es mejor que los juzguen por hacer, a que los juzguen por NO hacer”. Estas palabras nos dieron el envión necesario para levantarnos, para reforzar nuestros cimientos y crear una Fundación que nos permita ayudar a quien lo necesite. Es así, que el 2015 cambiamos de enfoque y nos consolidamos como la Fundación Boliviana de Seguridad y Salud Ocupacional – FBSySO (La SySO). Esto, bajo el enfoque de ser una institución que consigue recursos con su trabajo, para solventar su causa social. La fundación no tiene dueños, solo administradores para cumplir su objetivo institucional.
Fueron unos años caóticos, con picos altos y bajos, con más errores que aciertos; pero conscientes del principio de mejora continua. Quizá no hayamos hecho todo lo que hemos querido, pero mirando atrás y conectando los puntos pasados, hoy nos encontramos con más fuerza para ejercer nuestra misión buscando los recursos necesarios para apoyar a quien necesite y cumplir el fin con el que soñamos esta aventura.
Nuestra estructura organizacional
Nuestros valores corporativos
• Transparencia
• Excelencia
• Adaptabilidad
• Diligencia
• Constancia
• Justicia
Nuestra Visión
Que nuestra pasión nos permita ser el referente nacional en materia de Seguridad y Salud en el trabajo, cuando se piense en seguridad, se debe pensar en la FBSySO
Nuestra Misión
Construir un liderazgo sustentable y solidario en SST, con el impulso de actividades técnicas, científicas, de formación e innovación siempre bajo el enfoque de apoyo a la sociedad.